“Reina Escolapia” se trata de una marcha procesional compuesta por el músico granadino Elías Santiago Vico, siendo esta su primera obra para la Semana Santa de Granada. La marcha consta de una estructura clara, siguiendo las bases de la música procesional tradicional del siglo XX: una introducción, un tema A, un tema B (fuerte de bajos), reexposición de la introducción, y, por último, el tema C, el trío final.
La marcha comienza con un recogido piano donde solamente las voces principales de las maderas llevan la delicada melodía de esta primera parte, la cual se sustenta sobre una camuflada cadencia flamenca que va a ser la base de esta introducción. La introducción se repite en forte, donde se añade la llamada a modo de contracanto de las trompetas, aportando marcialidad a este fragmento, aludiendo así al Hermano Mayor Honorario de la Cofradía: el Ejército del Aire.
Transcurrida la introducción, volvemos a un piano donde se desarrollará el tema A de la marcha, que rompe con la estructura y tendencia anterior, centrándose ahora en rápidas y ascendentes y descendentes melodías, recordando así el fluir del río Genil al paso de la Reina Escolapia sobre su Puente Romano. La base armónica se inspira en el recurso que ya usaba J. S. Bach en sus obras, donde el movimiento del bajo dibuja una especie de cruz, recordando a la Cruz de Cristo. De esta forma, el autor quiso tener presente al titular cristífero de la Cofradía, el Santísimo Cristo de la Expiración.
Acto seguido, aparece el clásico fuerte de metales, de carácter imperial y potente, con una peculiaridad en la zanga de las maderas, donde deja a un lado el tradicional “corchea + 2 semicorcheas” que tantos autores emplean, para introducir una “corchea con puntillo + semicorchea”, figuración que aparece también en el fuerte de bajos de la marcha que ya es un himno para la corporación: “Mayor Dolor”, de Ángel López Carreño. De esta forma, el autor alude de esta forma a aquella marcha del año 2000 y que tantos momentos mágicos ha regalado.
Tras el fuerte de bajos, se re expone la introducción en forte, de la misma forma y con la misma instrumentación que se ha comentado anteriormente. Inmediatamente después, se aprovecha la dominante para modular hacia la tonalidad mayor, en la cual se va a desarrollar el trío final de la obra.
El trío final comienza con una dulce melodía interpretada por un clarinete solista, acompañada por unos tímidos arpegios en los saxofones tenores, y todo ello sobre el colchón armónico que lo sustenta. La melodía, en palabras del autor, “es reflejo de la mirada dulce y serena que posee la Virgen del Mayor Dolor y de la sensación de paz que transmite con solo mirarla”. El trío final, se repite en forte y con todos los instrumentos, añadiendo de nuevo unas fanfarrias de carácter marcial en las trompetas, y con un ritmo más jovial y alegre para culminar la composición.
La marcha fue estrenada el 25 de febrero del año 2018 por la Banda “San Isidro” de Armilla, con su propio autor a la batuta.
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