La noche proseguía y los más de
40 componentes de la joven banda, tras cruzar el río Genil por esos benditos
adoquines, llegaban a las puertas de la Parroquia repleta de gente, su gente,
inquieta a la vez que entusiasmada de poder verlos y escucharlos. Era el
momento de mostrar a sus hermanos el fruto de largas noches de esfuerzo,
trabajo, dedicación y cariño, mucho cariño en los ensayos realizados para
ofrendar su música al Santísimo Cristo de la Expiración y su Bendita Madre del
Mayor Dolor.
El acto lo condujo la querida
Dña. Encarnación Vargas, quien puso en contexto a todos los presentes
trasladándonos al Viernes Santo, a esa noche de luto y penitencia, bajo la luz
de la luna y las estrellas, donde la Hermandad con devoción, irá al son de su
banda de cornetas y tambores; donde el silencio se rompe con cada paso que se
da, el elegante cortejo negro y blanco desplegado en un acto de fe y
penitencia… así es la noche santa más esperada… y todo comienza con La
Expiración, siendo la primera marcha que nuestros hermanos músicos
interpretan ya formados.
Fuera nervios, atrás quedaban
todo un duro año de trabajo lleno de pequeñas trabas, de tener que solventar
algún sobresalto que otro… pero todo se ha superado y sirve para cimentar más
aún el proyecto de esta joven banda que, tras un nuevo redoble de su cuerpo de
batería, interpretaba Soledad de San Pablo, siguiendo ese estilo clásico
que impera en su repertorio.
Proseguía el concierto y Encarna
nos invitaba a mirar a Cristo, cuya mirada al cielo nunca ve Granada, quien nos
enseña a amar sin medida, a rezar y perdonar por encima de todo. Iba a sonar Reflejos
de la Cava y uno podía cerrar los ojos y ver caminar al Señor, al Rey de
Reyes, a Dios todopoderoso, al Rey del verdadero amor, al Santísimo Cristo de
la Expiración.
Y si se habla del Ejército del
Aire, hay que hablar de la Reina de Roma, cuya corona le donase el Ejército en
1950 y desde entonces los tiene a todos bajo la protección de Su manto. La
Reina Escolapia, en el Viernes Santo, llora la pérdida de su hijo Jesús de la
Expiración, siendo la Madre de todos, nos consuela en Su dolor, imploramos ante
Su belleza, que Su amor perdure en nuestro corazón.
La banda, en sintonía con las
palabras de la oradora, interpretó magistralmente la marcha Ave María,
con unos acordes sobrios y elegantes, un compás pausado, sin estridencias. Así
es como suena nuestra banda, elegante, es lo que desprende en cada uno de sus
sones, es la imagen de la banda. Para no romper el clima generado, otro guiño y
agradecimiento a nuestra querida Base Aérea, interpretando la marcha En el
cielo de tu Gloria
Se iba acercando el final del
concierto, pero todavía faltaba algo, la banda estaba inconclusa, y eso se
remedió con la entrega de su nuevo guion, aquel que la identifica y representa
en cada momento, el que encabeza su formación y sirve de carta de presentación,
para reconocer que tras ese asta de plata y terciopelo negro, suenan los
sobrios sones de Expiración.
Y como suele ser habitual, la
banda tuvo a bien sorprendernos con una nueva interpretación, esta vez la
partitura interpretada era Misericordia Isleña y a continuación se puso
el broche de oro con la Marcha Real.
Noche perfecta, noche llena de
nervios, emoción y ganas, muchas ganas de demostrar que en 2019 nacía una banda
joven con toda la ilusión del mundo y que sigue trabajando para engrandecer la
figura de Dios Padre de la Expiración y María Santísima del Mayor Dolor.
Faltaba el detalle de la noche que ya se vivió en la intimidad que proporciona la Parroquia una vez que todo ha terminado, allí, a los pies del Santísimo Cristo, la banda se reunió entorno a su Director Musical, D. Julio León, quien interpretó un solo de corneta en forma de plegaria. Colofón perfecto para una noche soñada… pero el sueño no acaba aquí, sino que continua su camino… sigamos soñando, sigamos escuchando a LA EXPIRACIÓN.
Presiosisima banda enhorabuena
ResponderEliminarLa banda necesita aumentar el número de componentes propios, sin contar los numerosos refuerzos que vienen de fuera, reforzar todas las voces, porque no es lo mismo tocar en una iglesia que en la calle, que luego el sonido se pierde... Deberían que centrarse en hacer un repertorio acorde con su Hermandad y luego pensar en el resto.
ResponderEliminarEn cuanto al concierto, no sonó mal, con la potencias de las cornetas se taparon ciertos defectos. Los uniformes tienen buena pinta, cuando esté completo serán muy elegantes. Por último, no me gustó el comportamiento de algunos miembros de la banda durante el concierto, hablando y riendo entre ellos.
En definitiva, un aprobado y la duda de si es capaz de crecer o se quedará estancada. La pelota está en el tejado de la banda, a ver qué hace.
Yo pienso que lo hicieron estupendamente para que los den por muertos callaron muchas bocas con su música y sus trajes, lo que pasa que en Granada la envidia corroe y mi más sincera enhorabuena para la hermandad y el grupo de músicos que forma esta banda, les deseo buena progresión en su futuro.
ResponderEliminarYo pienso que la banda está haciendo un gran trabajo el pasado sábado taparon muchas bocas tanto musicalmente como con sus trajes lo que pasa que en Granada la envidia corroe y hay que ser un poquito más sanos la banda sonora espectacular mi más sincera enhorabuena para la hermandad y ese grupo de músicos les deseo un futuro estupendo
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